Carles Seguí

Después de más de 20 años trabajando en diversas multinacionales, me di cuenta que había perdido la pasión por ese tipo de trabajo en el que muchas veces eres un “número más“, me aburría ver las cosas de siempre, los egoísmos de siempre, las sonrisas falsas y sobre todo, a las “personas pequeñas“.

Me di cuenta que lo que realmente me apetecía era volcar todo mi conocimiento acumulado en un perfil de personas a las que sabía que, verdaderamente, iba a ayudar, gente con humildad y ganas de aprender, gente que te da un “gracias de corazón” abierto.

Muchos años atrás ya había pensado en esta posibilidad, pero viendo las cosas en perspectiva, he llegado a la conclusión que las oportunidades aparecen cuando es tu momento, ni antes ni después. A pesar de ello, la decisión no era para mí nada fácil, venía de un entorno muy cómodo, con sueldos muy altos, gastos pagados, hoteles de alto nivel y un entorno de “alto standing” que suponían una barrera alta que superar, una zona de confort muy amplia.

Ahora que han pasado más de 5 años, sólo puedo decir que estoy muy contento de la decisión que tomé y que me produce verdadera pasión y satisfacción percibir el agradecimiento de tantas personas por el trabajo conjunto realizado.